Julio Vasquez.

Radio Renacer

Radio Renacer

Radio Renacer

domingo, 7 de marzo de 2010

Victor Hugo Saavedra, y el sueño americano


La ilusión de Víctor Hugo Saavedra acaba de cumplir la mayoría de edad, pero desde hace varios años su sueño americano se hizo realidad. Amante de las historias de la calle, sobre todo cuando son de las calles en guerra, este colombiano comenzó a correr antes de la línea de salida y hoy disfruta del jugo que le ha sacado a la vida.

A la conquista de la ilusión

Con obstáculos como cualquier inmigrante en Estados Unidos, Víctor Hugo logró sobrevivir y un poco más. "Mi historia es el típico sueño americano. Como muchos llegué pobre; Me tocó hacer un poco de todo, desde pintar hasta trabajar en una fábrica y restaurantes", comenta el periodista bautizado en Chicago por sus admiradoras como "el reportero galán".

Aún con tiempos difíciles, Víctor Hugo consiguió una beca que le permitió estudiar y desarrollar su carrera, claro, empezando desde abajo y hasta convertirse en uno de los corresponsales de guerra que Univision envió a cubrir el conflicto contra Irak que culminó con el derrocamiento de Sadam Hussein.

Corona de historias

"La guerra es como la corona que tienes como reportero porque es donde tienes que trabajar en las situaciones más difíciles, donde está tu vida en peligro, tienes que pensar rápido, debes actuar responsablemente. Entonces cuando has cubierto una guerra, cuando has sobrevivido una guerra, ya puedes decir soy un verdadero periodista, soy un verdadero reportero. No que los otros no lo sean, sino que es como el gran logro", describe Saavedra.

¿Qué se necesita para poder contar una historia?

Primero que nada tienes que saber escuchar a la persona que te la contó a ti. Segundo, te tiene que gustar contar la historia. Tercero, tienes que, genuinamente, sentir la historia. Genuinamente te tienes que relacionar con el inmigrante que sufre al cruzar la frontera, con la madre que le acaban de matar su único hijo en la guerra. En pocas palabras, te tienes que relacionar bien con las personas, entender su historia, sentir su historia, para entonces poderla contar bien.

¿Alguna historia te ha quebrado la voz al aire?

A la hora de estar reportando en vivo, ninguna me ha quebrado. En Irak me hicieron ver la vida de una manera diferente. Aprendí a valorar más la vida y aprendí lo que todos debemos de saber, que la vida es muy efímera y por lo tanto debemos de vivirla como si fuera hoy nuestro último día, diciéndole a las personas que queremos que los amamos y siendo buenos en esta vida. Porque al final, lo que queda, es la manera en que nosotros hemos afectado la vida de otras personas.

Romántico por naturaleza de su profesión, Víctor Hugo no está hecho para el trabajo de escritorio, pues lo suyo es la calle con todos sus olores y sabores, con todas las historias que se cruzan ante sus ojos mientras pedalea, cuando se puede, de su casa al trabajo.